Primavera feroz. Va mi ternura
por las más hondas venas derramada,
fresco hontanar, y furia desvelada,
que a extenuante paso se apresura.
Oh, qué acezar, qué hervir, oh, qué premura
de hallar en la colina clausurada,
la llaga roja de la cueva helada,
y su cura más dulce, en la locura.
Monstruo fugaz, espanto de mi vida,
rayo sin luz, oh, tú, mi primavera,
mi alimaña feroz, mi arcángel fuerte.
¿Hacia qué hondón sombrío me convida
desplegada y astral tu cabellera?
¡Amor, amor, principio de la muerte!
No hay comentarios:
Publicar un comentario